CRONICA PROCESIÓN HERMANDAD PENITENTES XÀTIVA
Sábado, 9 Marzo 2024
El pasado sábado 9 de marzo, una representación de Los Caballeros y Damas de la Real Orden del Puig participó en la Solemne procesión de la Vera Cruz que procesiona la Hermandad de Penitentes de la Santísima Cruz de Xàtiva. El motivo no era otro que conmemorar el décimo aniversario de la constitución de esta hermandad de penitentes de la Semana Santa de Xàtiva.
Para ello, la Hermandad de Penitentes de la Santísima Cruz de Xàtiva organizó una serie de actos emotivos y penitenciales como fue un calvario Penitencial en la puerta gótica de la Iglesia de San Francisco de Xàtiva con la lectura pública de textos y comentarios evangélicos. Tras el calvario se procedió a procesionar la santa reliquia por las calles del casco antiguo de Xàtiva hasta llegar a la Iglesia Basílica de Santa María donde se llevó un emotivo acto penitencial dirigido por el Muy Ilustre Abad de Xàtiva y otros sacerdotes que le acompañaban. Posteriormente, la procesión de la santa reliquia continuó hasta la Iglesia de San Francisco donde se realizó una oración y una plegaría pública.
Todos estos actos contaron con nuestra presencia como participantes, siendo el elenco general: Los Caballeros y Damas de la Real Orden del Puig, los cofrades de la Cofradía de la Virgen de los Dolores de Cullera, miembros de la Junta de Hermandades y Cofradías de la Semana Santa de Xàtiva, el Muy Ilustre Abad Mitrado de Xàtiva y sacerdotes de otras iglesias de la localidad que, sin duda, otorgaron solemnidad y rigor.
La hermandad procesiona una esquirla de la Vera Cruz de Cristo, autentificada por el mismo Vaticano y ubicada en una sencilla cruz de maderos y se caracteriza por portar pesadas cruces de madera, símbolo inequívoco del cristianismo, que surcan las calles a hombros de sacrificados hermanos en franca penitencia. Pero, si hay una característica singular y diferenciadora con respecto al resto de cofradías y hermandades de la Semana Santa de Xàtiva, es el Anonimato.
Todos los hermanos que integran la Hermandad son anónimos por voluntad propia y como signo de humildad y desprendimiento del propio “yo” a favor del “nosotros”. El carácter individual se somete al carácter comunitario de la Hermandad, donde nadie es más que nadie, “todos somos iguales ante los ojos del Señor” (Juan 13: 12-15).
La voluntad manifiesta de los hermanos penitentes a los ojos del mundo no es una ocultación de la personalidad, ni siquiera una postura mediática, es un auténtico y verdadero sentimiento cristiano que entronca con la virtud teologal de la Caridad. Los Hermanos Penitentes se hacen anónimos para mostrar humildad al mundo y rezar por todos, en comunión y armonía.
Por tanto, y como consecuencia de ello, los Hermanos Penitentes – y las promesas que participan de sus actos- están obligados a prestar juramento de anonimato y voto de silencio para no revelar la identidad de ninguno de los integrantes.
Antonio Vela, comendador religioso.